Hoy, es cada vez más necesario realizar estudios de especialización de posgrado. Optar por este grado académico puede ser una de las mejores inversiones que hagas; por lo tanto, debe ser una decisión cuidadosamente calculada. Afortunadamente, en el Perú existen muchas opciones de financiamiento educativo para quienes deciden llevar una maestría.
Seguir siendo competitivo en un mercado laboral tan exigente es la principal motivación de quienes desean optar por realizar una maestría. Sin embargo, en algunos casos, el factor económico puede ser un motivo que impida o retarde la toma de esa decisión, sea porque no se cuente con los recursos necesarios o por el temor a que tu estilo de vida se vea afectado.
Sabiendo de la importancia que tienen las maestrías, aquí enumeramos algunas de las opciones que tienes para conseguir los recursos económicos necesarios que te permitan financiar tus estudios de posgrado y así seguir escalando profesionalmente.
Hoy, las entidades financieras más importantes del país apuestan más por los jóvenes recién egresados y por todos los profesionales que deseen dar un paso más en su carrera. Además, la alta competencia entre los bancos y demás entidades hace que, muchas veces, los créditos para estudiantes universitarios vengan con muchos beneficios atractivos en los productos que ofrecen.
En el Perú, el importe promedio que se puede financiar para programas de especialización puede llegar hasta los 300 000 soles y otorga un plazo máximo de 10 años para saldar la deuda. Estos datos pueden variar teniendo en cuenta la particularidad de cada caso y solicitud, además de las cifras bajo las que trabaja cada entidad financiera.
Muchas instituciones, además, ofrecen algunos beneficios, como períodos de gracia que pueden llegar incluso a 30 meses, gastos de manutención, atractivas tasas de interés y plazos más largos que para otro tipo de préstamo. Debes evaluar el que más te convenga.
Por otro lado, los requisitos solicitados son bastante sencillos. Por ejemplo, la edad mínima requerida es de 20 años y el ingreso bruto mínimo que se debe acreditar es de 1500 soles. A ello se suma la constancia de ingreso a la universidad o carta de aceptación, proforma de estudios, y otros documentos que consignen datos personales como el DNI.
Es importante mencionar que debes ser muy responsable con los pagos. Lo más recomendable es planificar correctamente tus gastos de modo que puedas cumplir con las cuotas sin que tus necesidades básicas se vean afectadas.
Si en tus posibilidades no se encuentra el solicitar un préstamo para estudios universitarios o, si por algún motivo, no puedes acceder o no eres elegible para pedir un crédito estudiantil, una buena alternativa son las becas.
En este caso, algunas entidades ponen a disposición de los postulantes a maestrías y doctorados diversos concursos para aplicar a una beca. Esta puede financiar parte de los costos de la maestría y, en otros casos, la totalidad de los estudios.
En el sector privado son diversas las entidades que ofrecen becas parciales y totales a estudiantes destacados de maestría. Dependiendo de la especialización que se tenga en mente cursar, los alumnos pueden buscar los requisitos necesarios y aplicar a las becas.
Por ejemplo, la Pontificia Universidad Católica del Perú ofrece diversas becas y beneficios para los estudiantes de maestría y doctorado. Estas ventajas van desde reconocimientos por excelencia académica y deportiva hasta descuentos por pagos al contado y financiamientos con entidades externas.
Al obtener una beca es muy difícil que tu estilo de vida se vea afectado, ya que una entidad externa financia la maestría. Sin embargo, hay que tener en cuenta que ser acreedor de una beca es tanto un logro como un compromiso que debe asumirse con seriedad y responsabilidad. Si quieres algunos consejos sobre cómo organizar tus finanzas para estudiar tu maestría, revista este post.
Además de las opciones ya descritas, existe otra modalidad para cubrir los gastos de tu posgrado. Es posible que la universidad donde hayas escogido estudiar tu maestría cuente también con un programa de financiamiento interno que otorgue préstamos para estudiantes.
Otra forma en que las universidades ayudan a sus alumnos es a través de becas o descuentos para sus estudiantes destacados en base a su rendimiento académico. Puedes poner atención o solicitar esta información en la unidad académica encargada y, con el esfuerzo necesario, podrías ser quien acceda a estas facilidades.
Estos son los métodos más conocidos y que mayormente se recomienda a los aspirantes de posgrado para financiar sus estudios de maestría y continuar especializándose. Es importante tener en mente que, si bien el depender de un financiamiento externo puede resultar difícil durante algunos años, el cursar una especialización hará que lo invertido retorne a futuro.
Es por ello que podemos decir que no hay excusas para continuar con tu crecimiento académico. Evalúa tus posibilidades y encuentra la opción de financiamiento educativo que más te convenga y, por último, decídete a comenzar con tu desarrollo profesional estudiando una maestría. Te invitamos a conocer las ventajas de la Escuela de Posgrado de la PUCP.